Silla de Director Plegable de Jardín en Madera Ridley

Diseño icónico, comodidad sin límites. Este es el lema con el que hemos creado la Silla de director plegable de jardín en madera Ridley. La icónica pieza de asiento de los cineastas encuentra una nueva expresión en este diseño elegante a la par que funcional, ideal para establecer un punto focal en tu jardín, patio o terraza. Su silueta esbozada sobre líneas rectas y minimalistas, sumada a su estética clásica y colores vivos, le otorgan un carácter sofisticado que elevará al instante la armonía de tus espacios de exterior. Ridley ha sido elaborada en madera de acacia, un material ideal para lucirse al aire libre gracias a su alta resistencia y durabilidad. El acabado lijado y barnizado de la madera resaltan la belleza natural de las vetas de este noble material, garantizando un escenario visual de impacto en tu jardín. El asiento y el respaldo, confeccionados en 100% poliéster, proporcionan una estructura ligera y plagada de confort, ideal para disfrutar de una agradable lectura a la fresca o simplemente para relajarte bajo los cálidos rayos de sol. Las patas son la clave estética de este modelo, pues su disposición en cruz evoca los clásicos escenarios cinematográficos, además de estar equipadas con tacos de caucho para proteger los suelos y superficies. La guinda del pastel la protagoniza su carácter plegable, permitiéndote guardarla o transportarla sin esfuerzo donde más la necesites. ¡3, 2, 1, acción! Toma asiento y déjate sorprender por la gran versatilidad de Ridley, una pieza de asiento que no solo se convertirá en un lugar para sentarse, sino en un clásico reinventado que transformará cualquier espacio en un rincón plagado de distinción y bienestar.

Todas las piezas de mobiliario que se coloquen en exteriores requieren un cuidado especial. Sigue las instrucciones de cuidado específicas para cada tipo de madera, evitando el uso de productos químicos. Evita exponerlas al mal tiempo y a la humedad, así como dejarlas durante un tiempo prolongado al sol. Guárdalas al abrigo cuando no estén en uso y, sobre todo, durante los meses de invierno.