El piso diseñado por Sebastien Robert Homestaging, en pleno corazón de la cosmopolita Barcelona, consigue el equilibrio perfecto combinando el estilo balines con los muebles de ratán.
Los muebles, techos altos y las ventanas de madera, cumplen un rol fundamental para crear una atmósfera acogedora y cálida. El toque exótico lo ponen las fibras naturales como el ratán, yute o algodón, junto al uso del verde maxi en interiores, que nos traslada a las suaves playas de Indonesia.
Sus piezas han sido seleccionadas cuidadosamente para un resultado de revista. En este espacio open-concept, donde la verdadera protagonista es la hamaca Thana, porque, ¿a quién no le gustaría tener una en el salón?
El tándem perfecto
En el comedor, el Mix & Match perfecto es la mesa de comedor Sami, combinada con las sillas de comedor Zole. Consiguen un espacio confortable y sobre todo, ¡muy cómodo!
En el corazón de la casa
Nos declaramos fans de las cocinas abiertas, y si están llenas de fibras naturales todavía más. Un espacio acogedor, donde la protagonista es su barra americana, perfecta para los cafés a primera hora de la mañana.
Un salón comedor con mucha esencia
Una apuesta por muebles y accesorios de decoración combinables, en tonos claros y neutros para potenciar la luz de la casa, que logra el espacio perfecto para ponernos en modo off.
Un look versátil
La zona más comfy sin duda es el salón. Cojines mulliditos y blanditos para crear junto al sofá modular el lugar de chill perfecto. Lo mejor de ser un sofá modular es que puede convertirse en dos sillones individuales, ideal para pasar largas tardes de lectura.
Serenidad máxima en el dormitorio
Sin duda, el relax y la desconexión son los protagonistas en esta área. Un espacio armónico y equilibrado perfecto para relajarnos gracias a su paleta de colores neutros y sus suaves textiles, donde no podía faltar una green corner.
La luz tenue cobra importancia en estos espacios, ayudando a crear el clima adecuado. Elemento que se utiliza para sumar un plus de estilo con las lámparas vintage Lucya. ¡Un lugar de ensueño!
Minimalismo y un toque bohemio se convierten en el escenario perfecto para (re) conectar con nosotros mismos, consiguiendo que la vida slow traspase la pantalla.