La decoración rústica en el hogar: cómo traer la tranquilidad del campo a tu casa

Si eres de esas personas que prefiere el campo a la playa, te entendemos. No hay nada mejor que el olor a pino mojado, el canto de los pájaros para despertarse o disfrutar de un libro al lado de una chimenea. ¿Por qué no llevas a tu hogar un poco de esa tranquilidad propia del campo? Descubre los beneficios que la decoración rústica puede aportar a tu casa.

La decoración de casa rústica es aquella que nos recuerda al campo y la montaña. Pero cada vez es más común encontrarla en grandes centros urbanos. Y es natural, pues muchas personas en cierto modo buscan mantener el contacto campestre. Además, se trata de una decoración que nunca pasa de moda y que encima combina bien con mobiliario más moderno. Por ello es muy fácil adaptarla a nuestros hogares y conseguir así que reflejen la tranquilidad del campo.

La arquitectura de las casas rústicas

La arquitectura de las casas rústicas tiene ciertas particularidades que la diferencian de los hogares más comunes. Cuando entramos en salones rústicos lo que más suele llamar la atención es la desnudez de sus techos. Al igual que ocurre con la decoración industrial y con la decoración mediterránea, las vigas de madera se despojan de todo para mostrarse a la vista. Como veremos, este material, la madera, adquiere gran protagonismo en las fincas rústicas.

Los techos desnudos suelen ir acompañados de paredes de piedra y habitaciones con arcos en los accesos e incluso alguna bóveda. Son elementos típicos de las casas rústicas, pero como decíamos, no es estrictamente necesario contar con una casa tan tradicional para poder disfrutar de la decoración de casa de campo.

Muebles y decoración

Lo primero que hay que tener en cuenta a la hora de ponerse con el diseño del interior es que la decoración rústica requiere de muebles de gran tamaño normalmente. Es la antítesis de la decoración minimalista.

Estos muebles rudos deben ser de materiales naturales, destacando la madera, pero también el metal y la piedra. ¡E incluso el mimbre! Apuesta en los salones por grandes sofás y sillones en torno a una mesa y lograrás así que transmita una hogareña calidez sin necesidad de chimenea.

Además, invita a recuperar muebles antiguos para darle un aire más retro, pudiendo así nutrirse también de la decoración vintage. El estilo rústico es de corte tradicional, pero combinándolo con imaginación encajaría perfectamente con muebles más modernos. No necesitas ponerte a talar pinos para poner estanterías o armarios en tu casa. No temas comprar muebles de este siglo mientras respetes la armonía de tu hogar.

Paredes y suelos

¡No nos olvidemos de las paredes y el suelo! La mejor forma de presentar nuestra decoración de estilo rústico es con pintura en tonos neutros para resaltar los elementos de decoración y lograr un ambiente acogedor.

En definitiva, la decoración rústica es una excelente opción para aquellos que buscan un ambiente tranquilo y acogedor en su hogar.